Muchas veces cometemos el error de buscar que nuestro producto nos guste a nosotros, cuando a quien le debería gustar es principalmente a nuestro cliente.
Entendamos de una vez por todas la definición PROPUESTA DE VALOR:
“Es el conjunto de beneficios que valoran tus clientes de tus productos y servicios.”
O explicado con un dibujo:
Los beneficios son creadores de alegría y aliviadores de frustraciones son aquellos que componen tu propuesta de valor
¡Esos “beneficios” son TU PROPUESTA DE VALOR! Y debes cuidarla y trabajarla inteligentemente.
¿Cuál es la diferencia entre reconocer y no reconocer tu oferta de valor?
Cuando sí la reconoces:
- Enfocas tu tiempo y esfuerzo en aquello que tus clientes aman, te hace más rentable.
- Generas ideas en torno a seguir solucionando esos puntos de dolor de tus clientes, y tu negocio gira en torno a ello.
- Tienes el recurso discursivo para generar un mensaje sólido en tus campañas publicitarias.
Cuando no la reconoces:
- Tu esfuerzo se dispersa en cumplir incluso aspectos que tu cliente no valora, y eso te hace ineficiente.
Enfocas tiempo y dinero en ideas que no necesariamente funcionan. - Puedes llegar a sonar genérico, y utilizar frases que todos usan como “encuentra todo en un solo lugar, o los mejores precios y el mejor servicio”
Para ayudarte a reconocer la tuya, te dejo una lista de ejemplos de propuesta de valor:
- Una empresa con delivery gratuito
- Una Barbería que te ofrece bebidas para que te sientas a gusto
- Una ferretería especializada en productos para baño y cocina
- Un diseñador gráfico experto en logotipos
- Un restaurante moderno y a la moda con precios razonables
- Una tienda de repuesto con disponibilidad garantizada
- Una empresa de envíos que te mantiene informado sobre el estatus de tu encomienda.
- El servicio de transporte más puntual de la región
- La heladería con la mayor variedad de sabores del mundo ( ¡¡¡La Heladería Coromoto en Mérida conoce su oferta de valor!!!)
Yo invito a los empresarios a que se animen a crear su primera PROPUESTA DE VALOR
¿Cómo? Entendiendo dos cosas:
- La propuesta de valor se divide en dos etapas.
- Se empieza siempre por el PERFIL DEL CLIENTE.
Veámoslo en una tabla:
Ahora reto a los empresarios a que esa lista de beneficios las resuma en una sola frase como los ejemplos que ya mencionamos.
¿Qué debes hacer una vez hayas identificado tu propuesta de valor?
- Esforzarte en perfeccionar esos beneficios para que sigan generando esa alegría en tus clientes o mitigando esa frustación.
¡¡¡Comunicarlo con por el mundo!!! ¡¡Con publicidad y mercadeo!!
Para que sigas profundizando en este interesante tema he preparado un vídeo titulado: Elabora una VERDADERA PROPUESTA DE VALOR [ con EJEMPLOS] donde además de esto menciono puntos importantes como:
¿Cómo identificar (con una fórmula) la propuesta de valor de mi producto/ servicio?
¿Es necesario consultar al cliente para construir esa propuesta?
Te invito a que veas el episodio y me cuentes qué te ha parecido este tema.
¡Hasta pronto!